Voy a cambiar…
Voy a cambiar mis orejas por oídos, y así, cuando suene la música del corazón, esa que tanto confunde, abrir las ventanas de par en par
…que se inunde todo
Voy a cambiar mis manos por caricias y las palmas por sonrisas para compensar la indignación. (¡Quiero vivir. Necesito vivir!). Si no,
¿qué sentido tiene todo esto?
Voy a cambiar mis miedos por unos guantes de boxeo y así, cada vez que asomen para bloquear mi espontaneidad darles un buen golpe
…en la boca del estómago.
Voy a cambiar los porros por un cuaderno. ¿Voy a cambiar el mundo? No, no es posible, pero voy a empezar por cambiar yo
y así, seguro, conseguiré cambiar la percepción de las cosas.
Un mundo mejor es posible… Creer en esto, es como un grito de esperanza, y yo
¡QUIERO TENERLA!
(¡Ah! por cierto, sigo INDIGNADO.)